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Hemos llegado al final del semestre Enero - Mayo 2008 en el que hemos compartido experiencias y reflexiones en el curso de Formación Humana y Compromiso Social. Al inicio del semestre vimos la película "Diarios de Motocicleta", un viaje que fue transformando a Ernesto Guevara, el pasante de médico, en una persona distinta. Él mismo lo expresa de la siguiente manera: "Yo ya no soy yo... por lo menos no soy el mismo yo interior". ¿Qué fue lo que le permitió ese cambio? Yo creo que no sólo el viaje pues uno puede viajar sin cambiar. Sin embargo, en su viaje tuvo la oportunidad y la voluntad de encontrarse con otros, de escuchar las voces de seres humanos pobres, dolientes, desposeídos y oprimidos pero a la vez alegres, generosos, sabios y aguerridos, luchando "por cada bocanada de aire y mandando a la muerte al carajo." Y yo creo que eso lo transformó.
En estos meses también nosotros viajamos a través del curso, abriendo nuestros ojos a otras realidades y nuestros oídos a otras voces, en cierta forma lejanas pero en muchos sentidos semejantes a las nuestras. Sin embargo, no puedo dejar de preguntarme si en este viaje hemos realmente cambiado o si sólo hemos caminado la ruta con la mirada vacía y los oídos sordos. ¿Qué pasó con nosotros? Esta es la pregunta que te invito a responder en este espacio, con el deseo de que se convierta en un testimonio de este tiempo en el que fuimos invitados a viajar a nuestro interior, a conocer el mundo en que vivimos, a aprender de otros que han levantado su voz por la Tierra y todos los que la habitamos, a soñar nuevas maneras de vivir juntos en este planeta.
Así que termino compartiéndoles que para mi este viaje fue una oportunidad de retomar la esperanza y de confirmar que lo que estoy haciendo como parte de mi misión en la vida tiene sentido. En muchos sentidos este no fue un semestre fácil para mi pero el estar en clase con ustedes y descubrirlos vibrando en las dinámicas, haciendo conexiones en las reflexiones o planeando con todo el entusiasmo las actividades para su acción concreta fue una gran alegría para mi. No es poco común escuchar que este tipo de cursos no vale la pena, que son una pérdida de tiempo, que en realidad no hay cambios importantes y que al final todos terminamos sintiéndonos muy bien con nosotros mismos mientras regresamos a la vorágine de superficialidad y consumismo que la sociedad nos ofrece. Para mi ustedes son una confirmación de que las cosas no son así, de que el corazón humano que ha estado endurecido puede volverse otra vez un corazón vivo, que late al ritmo de la naturaleza y la humanidad, que es capaz de regresar al mundo la calidez del amor a través de la entrega y el servicio. No olviden que ese corazón puede volver a endurecerse, así que mantengan vivos los sueños y los ideales que han visualizado en este semestre para ustedes, para los que quieren y para esta Tierra.
Existe un proverbio chino que dice: "Si quieres felicidad para una hora, duerme una siesta. Si quieres felicidad para un día, vete a pescar. Si quieres felicidad para un año, hereda una fortuna. Si quieres una vida de felicidad, ayuda a los demás." Mi deseo es que sus vidas estén siempre llenas de felicidad. ;)